"Un niño que lee será un adulto que piensa"
Las sesiones simultáneas de lecturas de cuentos proponen ampliar el intercambio entre grupos escolares de distinta edad. E
n este caso conformar núcleos integrados con alumnos de las salas de 3, 4 y 5 años del jardín.
En las mismas se abren espacios de trabajo conjunto con niños de distintas edades por considerar que en dichos intercambios todos pueden aprender interactuando de manera sistemática con compañeros mayores o menores.
Enriquecer las prácticas del lector literario en e
l contexto de una creciente "comunidad de lectores" es el propósito didáctico central de esta situación. A partir del desarrollo de estas sesiones de lectura se propone a los alumnos la producción de recomendaciones sobre las obras leídas y comentadas, con el fin de que otros lectores tengan la oportunidad de conocerlas.
La literatura infantil no sólo es im
portante porque sirve de estímulo para el futuro de los niños, sino también porque contribuye al desarrollo del lenguaje, de la creación literaria, de la imaginación de los mundos posibles, entre otros. Además, porque recrear la vida de los personajes le permite vivir una serie de experiencias y situaciones que le ayudarán a adquirir mayor seguridad en sí mismo, a integrarse y formar parte del mundo que lo rodea.
Sugerencias para inspirar a los niños a ser buenos lectores:
1. Dar el ejemplo: enseñamos con el ejemplo y este caso no es la excepción. Las personas adultas somos un modelo de lectura para los niños. Leamos delante de ellos, disfrutemos leyendo.
2. Proponer o sugerir, no imponer: evitemos tratar la lectura como una obligación, pues lo sentirán como un castigo en lugar de algo placentero. Dejemos a su alcance libros que creamos les puedan interesar y esperemos a ver su reacción.
3. Ser constantes: todos los días hay que reservar un tiempo para leer. Busquemos momentos relajados, con buena disposición para la lectura. Creemos el hábito de leer antes de dormir en lugar de ver la televisión o usar la computadora.
4. Pedir consejo: el colegio, las bibliotecas, las librerías y sus especialistas serán excelentes aliados. Hagámosles una visita.
5. Llevarlos a librerías y bibliotecas: enseñemos la magia de las librerías y bibliotecas. Vayamos con tiempo y enseñemos a descubrir la enorme cantidad de libros que existen. Dejemos que nuestros hijos escojan un libro con la condición de que lo lean al llegar a casa.
