Cada año, después de las vacaciones de verano, la vida nos da una nueva oportunidad de volver a empezar.
Tanto adultos como niños revisamos las herramientas de trabajo y, aunque la mochila sea la misma, ordenamos, sacamos lo que ya no sirve y agregamos cosas nuevas que nos pueden acompañar durante el nuevo período y reacondicionamos otras que ya tenemos, simplemente porque queremos que sigan junto a nosotros. Pero hay una mochila, la mochila del alma... esa que arrastramos con el corazón, donde guardamos muchas experiencias, recuerdos, alegrías, tristezas, triunfos, fracasos y orgullos. Esta mochila es la mejor que tenemos que preparar para este nuevo año.
Un nuevo año escolar es un enorme signo de interrogación, un desafio, una inquietud, una oportunidad.
Todos deberíamos ver qué traemos de nuevo para compartir, qué deberíamos dejar de lado y qué necesitamos mejorar.
¡Bienvenidas familias a este nuevo ciclo lectivo y feliz inicio 2017!
